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nº 6 en la serie LEI Lightbulb - El camino a seguir para el IPJ tras las recomendaciones de la JERS

Opciones de ajustes normativos globales


Autor: Clare Rowley

  • Fecha: 2022-03-09
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En septiembre de 2021, la Junta Europea de Riesgo Sistémico (JERS), que supervisa el sistema financiero de la Unión Europea (UE) para prevenir y mitigar el riesgo, publicó un documento puntual en el que se analiza la importancia del Identificador de Personas Jurídicas (IPJ). En el documento se destacan las oportunidades que presenta el IPJ para permitir transacciones más rápidas, más baratas y más seguras, no solo en los mercados financieros, sino también para todas las transacciones financieras en las que participan personas jurídicas, a nivel mundial. En este blog, la GLEIF acoge con satisfacción las recomendaciones formuladas por la JERS y ofrece una amplia perspectiva sobre cómo la regulación podría ayudar al IPJ a conseguirlas, superando los obstáculos en su camino para convertirse en la forma de facto de la identidad organizativa digitalizada del mundo.

La identificación clara y correcta de las entidades que participan en las transacciones financieras es un elemento fundamental para la estabilidad financiera, no solo en la UE, sino en todo el mundo. El documento de la JERS sostiene que «El IPJ [...] tiene el potencial de convertirse en el identificador de la economía mundial. Ofrece una serie de ventajas únicas e importantes, ya que garantiza un estándar y un formato en todas las jurisdicciones, se puede leer en cualquier idioma y proporciona una única ubicación para la información que se pude recuperar desde cualquier parte del mundo».

La GLEIF acoge esta valoración y está de acuerdo.

Para que el IPJ cumpla esta función, el Sistema Global del IPJ tiene que ir más allá de su objetivo inicial de permitir la identificación de entidades en los mercados de capitales y ampliar su alcance para abarcar las transacciones entre empresas. Aquí, los casos de uso de ejemplo son varios: los procesos de facturación podrían aplicarse de forma más eficiente y segura si se basan en el IPJ en lugar de en nombres y análisis de texto, como ocurre actualmente. La financiación comercial ya se está llevando a cabo de forma más eficiente aprovechando el IPJ y eliminando las complejidades de analizar diferentes idiomas y alfabetos. Además, los procesos de pago transfronterizos también pueden mejorarse significativamente utilizando el IPJ para identificar al beneficiario y al ordenante, como se sugiere en la hoja de ruta de la tercera fase del informe del Consejo de Estabilidad Financiera sobre la mejora de los pagos transfronterizos.

Aunque en el documento de la JERS se reconoce el amplio potencial del IPJ, en él también se destacan los posibles inhibidores de su adopción global, tanto por parte de las personas jurídicas financieras como de las no financieras. Entre ellos, se encuentran los problemas relacionados con el coste de obtener y renovar un IPJ, especialmente en lo que se refiere a las entidades más pequeñas, la falta de interés y conocimiento del IPJ fuera del sector de los servicios financieros y la falta de requisitos legales para el uso del IPJ en las jurisdicciones mundiales. La actual tasa de renovación anual, que requiere la actualización de los datos de referencia de la persona jurídica si ha cambiado, tampoco es lo suficientemente frecuente para algunos fines de supervisión, ya que los datos de referencia deben actualizarse continuamente para permitir una supervisión adecuada.

Para superar estos obstáculos, el documento de la JERS recomienda que el sistema global establecido para la emisión de IPJ se amplíe para incluir a los registros mercantiles nacionales, que podrían emitir IPJ en el momento de registrar la entidad, y a las instituciones financieras, que pueden facilitar la emisión de IPJ a las personas jurídicas como clientes asumiendo las funciones de Agente de Registro o Agente de Validación.

Opciones de ajustes normativos

Aunque la GLEIF no es un organismo regulador, puede ofrecer una perspectiva operativa sobre cómo la regulación global podría desempeñar un importante papel de apoyo para ayudar al Sistema Global del IPJ a lograr las recomendaciones formuladas por la JERS.

Legislación sobre empresas

Estudiar la posibilidad de modificar la legislación sobre empresas, en todo el mundo, para imponer la emisión de IPJ a todas las entidades registradas a través de los registros mercantiles pertinentes de cada jurisdicción, eliminaría el coste y la carga administrativa que, con el sistema actual, recae sobre la persona jurídica. Si, en cambio, los registros mercantiles emitieran IPJ, se pasaría a un sistema en el que, de hecho, el gobierno (a través de sus registros mercantiles) emitiría los IPJ basándose en los datos ya disponibles en la fuente oficial del registro mercantil.

En este caso, estas serían algunas de las ventajas:

  • Los costes por IPJ se reducirían considerablemente gracias a las economías de escala y los costes para la persona jurídica podrían eliminarse por completo o sustituirse por una tasa muy modesta en el registro mercantil. Sobre la base de la recuperación de costes, la GLEIF cobraría una tasa de servicio muy pequeña por los servicios prestados a los registros mercantiles que emiten IPJ. De este modo, todas las personas jurídicas podrían disfrutar del uso del IPJ en cualquier tipo de transacción comercial y de comunicación, mientras que los reguladores verían resueltas las necesidades de vigilancia y supervisión del mercado en todas sus jurisdicciones. Exigir el IPJ a las filiales de las personas jurídicas que se encuentran fuera de las jurisdicciones de un regulador, así como a los importadores de bienes y servicios, satisfaría muchas necesidades reguladoras a nivel mundial en las finanzas y fuera de ellas.
  • Los registros mercantiles crearían una conexión entre los datos del registro y el Sistema Global del IPJ, que satisfaría los fines de supervisión, ya que es la misma fuente de datos que utilizan actualmente las autoridades supervisoras. Esto podría allanar el camino para permitir el uso de los IPJ por parte del sector privado en los procesos de KYC regulados.
  • También significaría que las actualizaciones de los datos de referencia de las personas jurídicas estarían disponibles inmediatamente y todo el mundo podría acceder a ellos fácilmente, lo que aumentaría su atractivo para los inversores globales cuando se trata de sus necesidades de financiación. Esto representa enormes ventajas para los inversores globales de todo el mundo, a los que les gusta tener información «actualizada» sobre las empresas que están considerando o en las que están invirtiendo, y para las empresas que necesitan actualizar sus perfiles con proveedores de servicios financieros a efectos de AML/CFT.
  • Dado que los registros son la autoridad nacional para transmitir la identidad a las personas jurídicas y el experto local en datos de personas jurídicas, algunos registros mercantiles pueden considerar que la emisión de un número adicional (el IPJ) a las entidades no supone un gran aumento de sus actividades concretas. Cuatro registros europeos (y una oficina estadística europea), por ejemplo, ya tienen esta capacidad, como emisores de IPJ acreditados.
  • En total, esto supondría un pequeño precio que pagar por una capacidad significativamente mayor para controlar el riesgo sistémico global en los mercados financieros y una identidad global otorgada en el registro de empresas para todas las personas jurídicas.

Reacciones de las autoridades de la UE

En diciembre de 2021, la Comisión Europea publicó su comunicación sobre una estrategia de datos de supervisión en los servicios financieros de la UE, enlace aquí. En este punto, la Comisión señala que propondrá modificaciones en los marcos de notificación pertinentes para exigir sistemáticamente la notificación del IPJ por parte de las entidades que lo tienen y, para 2023, informará sobre si hacer o no obligatorio el IPJ para una gama más amplia de personas jurídicas. Por ejemplo, la Comisión propone un mayor uso del IPJ en los pagos y como parte del paquete legislativo contra el blanqueo de capitales.

Y en febrero de 2022, la Autoridad Bancaria Europea (ABE) publicó su respuesta a la recomendación de la JERS sobre la identificación de personas jurídicas. La ABE indica que apoya la introducción de un requisito legalmente vinculante a escala de la UE para el uso del IPJ. Además, la ABE afirma que apoya en gran medida cualquier iniciativa orientada a un uso amplio del IPJ y espera una mejora en su utilización en ámbitos como la notificación relacionada con los pagos.

Legislación sobre AML

Otra posibilidad de abordar las recomendaciones de la JERS podría ser a través de ajustes en la regulación contra el blanqueo de capitales en todo el mundo. Dichas leyes podrían actualizarse para incluir la obligación de que las instituciones financieras utilicen el IPJ para todas las personas jurídicas a efectos de las medidas de diligencia debida con respecto a los clientes.

En este caso, la aplicación la impulsaría el sector bancario a un coste muy bajo para las personas jurídicas. Las instituciones financieras ya pueden convertirse en Agentes de Validación o Agentes de Registro que trabajan conjuntamente con un emisor de IPJ acreditado para emitir IPJ a todos sus clientes. Estos modelos operativos ya existen en el Sistema Global del IPJ.

Esto también ayudaría a aumentar la cobertura a escala mundial ya que las entidades que participan en las transacciones financieras que se encuentran fuera de la jurisdicción de un regulador también tendrían que cumplir. Esto también
proporcionaría a los supervisores más transparencia sobre las entidades no jurisdiccionales que participan en sus mercados.

En el caso del modelo operativo del Agente de Validación, los costes adicionales de generar IPJ son relativamente bajos, pues la emisión y la renovación de los IPJ pasan a integrarse en los procesos existentes de incorporación y diligencia debida. En muchos casos, los costes los asumiría la entidad financiera. Los costes totales de emisión de IPJ también disminuirían en este modelo, aunque no tanto como cuando interviene el registro mercantil.

Legislación sobre pagos

Por último, también puede aprovecharse la legislación sobre pagos. El uso del IPJ para identificar a la persona jurídica ordenante y beneficiaria de los pagos encaja bien con el impulso global para mejorar la eficiencia de los pagos internacionales mediante la aplicación de estándares internacionales globales. La transición mundial al estándar de mensajería financiera ISO 20022 también permitiría una fácil integración porque el IPJ ya es una estándar de identidad reconocido en el marco de la ISO 20022. Como se ha señalado en el debate sobre la AML, la integración del IPJ en los pagos dependería de que las instituciones financieras facilitaran la obtención y el mantenimiento de los IPJ para su base de clientes.

La necesidad de un identificador global es cada vez mayor y se ve acelerada por la digitalización de las economías del mundo. Las empresas y los consumidores de todo el mundo se beneficiarán de un impulso concertado y coordinado orientado a lograr un estándar mundial y no propio que pueda confirmar con quién están haciendo negocios, no solo en
el contexto del comercio transfronterizo, sino también en el contexto de las compras en línea, los pagos en línea, la facturación y otras actividades relacionadas.

Un uso más amplio del IPJ, empezando por imponer su emisión a todas las entidades, permitiría a las empresas tener mejor visibilidad ante los inversores globales de otras jurisdicciones y a un coste mínimo. Además, permitirá mejorar la seguridad del comercio electrónico y de todas las transacciones digitales.

Se trata de una oportunidad única. Como señala la JERS «... ya se ha alcanzado un amplio consenso internacional sobre el IPJ, lo que le confiere una ventaja significativa sobre otros identificadores de entidades regionales e internacionales existentes en todo el mundo». Además, el Sistema Global del IPJ es el único sistema abierto, comercialmente neutral y avalado por organismos reguladores capaz de establecer una confianza digitalizada entre todas las personas jurídicas de todo el mundo. Se estableció como un bien público y la GLEIF seguirá impulsando su adopción y su uso en el mayor número posible de personas jurídicas de todo el mundo.

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Sobre el autor:

Clare Rowley es Directora de Operaciones Empresariales de la Global Legal Entity Identifier Foundation (GLEIF). Antes de unirse a la GLEIF, Clare Rowley trabajó en la Corporación Federal de Seguros de Depósitos de Estados Unidos, donde dirigió proyectos tecnológicos para mejorar los programas de resolución bancaria y contribuyó a las investigaciones sobre las hipotecas de alto riesgo (subprime). Clare Rowley es una analista financiera certificada por el CFA® y cuenta con un Máster en Análisis Predictivo por la Northwestern University.


Etiquetas para este artículo:
Regulación, Cumplimiento, Requisitos de Directrices, Global Legal Entity Identifier Foundation (GLEIF)