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Apoyo a las restricciones al dinero ilícito de la Comisión Europea

La función fundamental del IPJ en las reformas legislativas en materia de lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo (ALD/LFT) de la Comisión Europea


Autor: Clare Rowley

  • Fecha: 2020-07-21
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En mayo de 2020, la Comisión Europea presentó una serie de medidas diseñadas para apoyar la lucha de la Unión Europea contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo, las cuales incluían un Plan de Acción para la reforma legislativa del marco ALD/LFT de la UE a principios de 2021 (consulte los enlaces correspondientes a continuación).

En un contexto de aumento de las actividades delictivas en toda la UE durante la crisis sanitaria de la COVID-19, el Plan de Acción establece algunas medidas para ofrecer un marco preparado para el futuro que aplique mejor las normas ALD/LFT existentes, además de revisar dichas normas y reformar la estructura de control y aplicación de la UE.

Cuando se informó sobre el Plan de Acción se reconoció que: «es necesario que se amplíe el alcance de la legislación de la UE para abordar las consecuencias de la innovación tecnológica y los avances en las normas internacionales». Además se señaló que: «existen otras medidas que podrían incluir la idea de facilitar el uso de la identificación digital para la identificación remota de clientes, así como para la comprobación de la identidad del cliente y así establecer relaciones comerciales de forma remota».

Por estos motivos, el Identificador de Personas Jurídicas (IPJ) puede desempeñar una función esencial que propicie estos procesos.

El IPJ es una norma reconocida a nivel internacional que utiliza precisamente el tipo de innovación tecnológica mencionada en el Plan de Acción. El IPJ es un código alfanumérico de 20 caracteres que se basa en la norma ISO 17442 y se conecta de forma digital a información de referencia clave para permitir una identificación clara y única de personas, sociedades y organizaciones inscritas legalmente que, en su conjunto, se denominan personas jurídicas.

Afortunadamente, el Sistema Global del IPJ ya se ha gestionado a nivel de la UE a través de la Global LEI Foundation y se ha ideado para ofrecer un mayor nivel de transparencia para las autoridades y sectores de todo el mundo, que permite tanto emitir IPJ como facilitar el acceso abierto y sin restricciones a los datos del IPJ a escala internacional.

Como sistema validado a nivel reglamentario y supervisado por el Comité de Supervisión Normativa del IPJ (CSN IPJ) (consulte los enlaces correspondientes a continuación), se trata del único sistema que establece una identidad global reconocida, controlada y normalizada para personas jurídicas, vinculada al sistema de identificación nacional de la entidad.

Un ejemplo reciente de cómo puede el IPJ luchar contra el fraude en el comercio electrónico

En junio, Ville Itälä, Director General de la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF), confirmó que su oficina había detectado un repunte en el número de tiendas en línea que vendían equipos de protección personal y un porcentaje considerable estaba compuesto por estafadores. «Según los datos preliminares que hemos recopilado, se crearon cerca de 20.000 tiendas ‘COVID-19’ en plataformas de comercio electrónico que permitían la venta de mascarillas, desinfectantes o equipos de pruebas sin tener que seguir ningún trámite y sin que se comprobara su identidad», declaró Ville Itälä, además de añadir que la OLAF recibe «cientos de reclamaciones al día» de consumidores que bien no habían recibido su pedido, o bien habían recibido productos falsos o que no cumplían con los estándares (consulte los enlaces correspondientes a continuación).

«El uso obligatorio de identificadores comunes en los marcos de notificación, además de en toda la información pública, permitiría mejorar la calidad de los datos, reducir la redundancia, habilitar el tratamiento, agregación y cálculo de datos, así como garantizar la comparabilidad entre los datos que provengan de fuentes y periodos diferentes». Si se usa el IPJ con mayor frecuencia, se podría ayudar a luchar contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo tanto durante la integración como durante el control ulterior de la relación comercial y las operaciones correspondientes con el objeto de identificar operaciones sospechosas y hacer que las medidas de diligencia debida con los clientes (CDD) se apliquen de modo más eficaz». - Piers Haben, Director de Mercados Bancarios, Innovación y Consumidores, Autoridad Bancaria Europea (ABE)

Si la adopción del IPJ hubiera sido un paso obligatorio del proceso de inscripción de dichas plataformas de comercio electrónico, se podría haber comprobado su identidad automáticamente antes de que se produjera la interacción con los clientes. De esta forma, se les podría haber privado por completo de la facultad de operar sin la supervisión exigida.

A día de hoy ya está preparado para el futuro

En calidad de norma abierta y digital para la verificación de entidades, el IPJ ya está totalmente preparado para la era digital. La amplia interoperabilidad del IPJ permite que se integre de forma óptima tanto en los sistemas de gestión de la identidad digital centralizados como en los descentralizados, junto con los certificados digitales que cumplen el sistema europeo de reconocimiento de identidades electrónicas (eIDAS) que ya han unificado el uso de tecnologías de firma electrónica en toda la Unión Europea. Asimismo, como el IPJ representa información sobre la identidad comprobada en forma de un código alfanumérico de 20 dígitos, también ayuda a reducir el margen de error asociado a la ambigüedad en el lenguaje, la interpretación humana y la intervención manual.

Apoyo a las entidades financieras

El IPJ también ayuda a las entidades financieras en su empeño por luchar contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo. Al tratarse de una norma de identificación abierta y digitalizada, el IPJ permite que las entidades financieras lleven a cabo un tratamiento completamente automatizado y directo. Al sustituir las obsoletas comprobaciones manuales, el IPJ aumenta la velocidad y eficacia de la incorporación de clientes y los controles de conformidad en curso. Lo cual comprende una mejora del examen de las listas de sanciones y alertas y, por ende, ofrece nuevas eficiencias para las entidades y clientes, lo que reduce los costes de forma notable (consulte los enlaces correspondientes a continuación).

«La COVID-19 ha hecho que la economía se salte unos años en su progresión hacia la transformación digital. Desde la banca hasta la gestión de las cadenas de suministro, los sectores de todo el mundo están acelerando la digitalización de su procesos. En este contexto, las soluciones de identidad digital de confianza permiten optimizar los procedimientos de incorporación y mejorar la seguridad y las eficiencias de las operaciones digitales. En los mercados regulados, los procesos de «conozca a su cliente» (KYC) y de diligencia debida con los clientes (CDD) históricamente se han diseñado para las interacciones presenciales y en el mismo lugar, pero se ha demostrado que esta premisa cada vez resulta más inadecuada para la era digital. Los certificados digitales y los códigos IPJ representan dos factores fundamentales con capacidad para salvar las diferencias entre los modelos de identidad digital y la incorporación de clientes remotos de acuerdo con los procesos KYC/CDD, lo que mejora la fiabilidad y seguridad de las operaciones digitales más importantes». - Carmine Auletta, Directora de Innovación y Responsable de Estrategia de InfoCert

En lo que respecta a la lucha contra la financiación del terrorismo y el blanqueo de capitales entre las entidades inscritas legalmente, no existe otra herramienta que sea igual de eficaz.

Al exigir el uso del IPJ para la verificación de clientes en las próximas reformas legislativas en materia de ALD/LFT de la Comisión Europea, se reforzarán los procesos de identificación y verificación de entidades en el ecosistema financiero de la UE y se reducirán significativamente, a nivel internacional, las oportunidades de los delincuentes financieros para burlar el sistema.

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Sobre el autor:

Clare Rowley es Directora de Operaciones Empresariales de la Global Legal Entity Identifier Foundation (GLEIF). Antes de unirse a la GLEIF, Clare Rowley trabajó en la Corporación Federal de Seguros de Depósitos de Estados Unidos, donde dirigió proyectos tecnológicos para mejorar los programas de resolución bancaria y contribuyó a las investigaciones sobre las hipotecas de alto riesgo (subprime). Clare Rowley es una analista financiera certificada por el CFA® y cuenta con un Máster en Análisis Predictivo por la Northwestern University.


Etiquetas para este artículo:
Gestión de Relaciones con Clientes, Cumplimiento, Corresponsalía Bancaria, Identidad digital, Global Legal Entity Identifier Foundation (GLEIF), Conozca a su cliente (KYC), Razones comerciales del IPJ, Requisitos de Directrices, Gestión de Riesgos, Gobernanza, Regulación, Noticias del IPJ, Comité de Supervisión Regulatoria (CSR)